La localidad bonaerense solicitó al Congreso de la Nación que apruebe la despenalización del cultivo y la producción de cannabis para usos terapéuticos.
por Nerea González
Del párroco a los médicos, pasando la policía hasta llegar al intendente, los vecinos de localidad bonaerense de General La Madrid se unieron con un objetivo: alejar los prejuicios y convertirse en el primer lugar de Argentina en cultivar e investigar legalmente la marihuana con fines medicinales.
Situado en la zona sudoeste de la provincia más rica y poblada de Argentina, con unos 12.000 habitantes, el municipio, a través de su Concejo Deliberante, solicitó al Congreso de la Nación que apruebe la despenalización del cultivo y la producción de cannabis para usos terapéuticos, actualmente no contemplada en la legislación, para convertirse en el primer sitio en aplicarlo.
“Se llegó a un consenso colectivo que permitió que el Concejo Deliberante elevase una petición al Congreso”, explicó a EFE el intendente de General La Madrid, Martín Randazzo (Cambiemos), convencido de que los políticos tienen que “ponerse en los zapatos de los que sufren”.
“Estamos convencidos de que puede mejorar la calidad de vida de los pacientes, el dolor, el sueño…”, añadió.
En Sudamérica, solo Uruguay despenalizó la marihuana, Colombia para usos terapéuticos y Chile está estudiando una medida para legalizar también su uso médico.
Precisamente, este último modelo es el que sirvió de inspiración para la petición de General La Madrid. Pero todo empezó, en realidad, con un viaje a Canadá.
A raíz de la enfermedad de su hermana, de epilepsia refractaria, Marcelo Morante, medico de la localidad y profesor Universidad de La Plata, decidió formarse sobre los usos terapéuticos de la marihuana.
Era también un “desafío educativo” contra la “rigidez” que a veces paraliza a las instituciones a la hora de investigar temas controvertidos, según contó a EFE Morante.
Como en Argentina no es posible recibir este tipo de capacitación, en 2014 tomó un avión a Canadá y se trajo en la maleta los conocimientos necesarios para continuar investigando en su universidad, pero también con la idea de involucrar a “la comunidad” a través de un taller organizado en su propio municipio.
De ahí surgió la reciente iniciativa de que la Intendencia pidiera la modificación de la ley de drogas de Argentina con el objetivo de que General La Madrid se convirtiese en el primer lugar en cultivar la planta para hacer productos como el aceite de cannabis, los vaporizadores o los comprimidos que se aplican a tratamientos del dolor, del cáncer o de la epilepsia, entre otros.
“Con mucha emoción yo los vi muy interesados en el tema, muy comprometidos. Estoy orgulloso realmente de como respondió mi comunidad. Fui a dar una charla al Congreso Nacional de Neurología en 2015 y la sociedad científica se mostró más reticente”, aseguró Morante.
“Lo que ponían delante era el afecto, la solidaridad con el que tiene dolor, lo anteponían a cualquier tipo de especulación o de prejuicios”, prosiguió.
Médicos, policía y hasta el párroco del pueblo apoyaron la propuesta e incluso la llevaron a un nuevo nivel al proponer complementar el debate con la necesidad de educar a los jóvenes sobre buenos hábitos de salud.
Además, convertirse en el primer pueblo de Argentina productor de cannabis medicinal y contribuir a la investigación de sus usos a partir del permiso del Congreso para realizar estudios clínicos serviría a los lamadritenses como “excusa” para desarrollarse “como pueblo”, destacó Randazzo, tanto a nivel económico como científico y social.
“Ayudaríamos y nos ayudaría a nosotros, reforzaría nuestras raíces y nos pararía como un pueblo distinto”, concluyó el intendente.
EFE.